Hace algo
más de 10 años se me pidió hacer un artículo para una revista sobre los
alimentos transgénicos, realmente no recuerdo cuantas palabras eran las
exigidas, pero eran demasiado pocas para poder describir que eran, puntos
positivos y negativos, y al final termino luciendo demasiado positivo. Por
desgracia el editor era de filosofía naturalista, y no termino nada bien la
cosa. Desde entonces me ha perseguido ese artículo, molestando en mi orgullo,
queriendo redimirme haciendo un artículo del tema como se debe, pero por una u
otra cosa pasaron 10 años y no lo hice. Pero decidí de una vez no dejar pasen
otros 10 años.
El comienzo
La revolución genética en biología
inicia en 1953 cuando fue descubierta la estructura del ADN por Francis Crick y
James Watson, seguida del desarrollo las siguientes décadas de la tecnología
del ADN recombinante con la que es posible aislar y manipular fragmentos de ADN
de un organismo, y posteriormente introducirlos en otro organismo.
Pero fue hasta 1983 que se creó
la primera planta transgénica y en 1994 apareció el tomate Flavr Svr, el primer
alimento modificado genéticamente producido para el consumo masivo, modificado
para que resistiera más tiempo después de madurar.
Existen en la actualidad innumerables
organismos transgénicos, en su gran mayoría unicelulares y usados para la producción
de compuestos biofarmaceuticos e industriales. Sin embargo en este artículo
solo me enfocare en los organismos transgénicos de consumo humano o animal,
explicando lo que son y las cuestiones a resolverse para que realmente puedan
lograr el potencial tantas veces prometido.
Proteínas y Genes
Para comprender el concepto de un organismo transgénico o alterado genéticamente, primero hay que entender lo que es una proteína y un gen.
Todas las células de cualquier organismo desde una bacteria a una ballena necesitan proteínas para poder funcionar y existir. Debido a que las proteínas son compuestos químicos que usan las células para absolutamente todo, como maquinaria, herramientas, convertidoras de un químico en otro o disolvedoras de otros, productoras de energía, reforzadoras de materiales, material mismo, trasportadoras, sistema de comunicación entre células, entre innumerables cosas más. Para nuestro interés las proteínas tienen que ver por ejemplo con la apariencia, sabor, olor, nutrientes y defensas de una planta comestible.
Los genes pueden pensarse como un conjunto de recetas, que usa una célula de cualquier organismo para hacer todas las proteínas que necesita. Así que un gen es una receta para una proteína en particular. Siguiendo esa idea, como una receta que es el gen, tiene que estar escrito en algo físico, así como una receta de cocina está escrita en la hoja de papel de un libro.
Así que en el caso de un gen,
este está escrito en el compuesto químico Ácido Desoxirribonucléico o más
conocido como ADN. Este ADN se encuentra dentro las células en una estructura
llamada el núcleo celular.
Transgénicos
Así pues un organismo transgénico, es aquel que tiene genes diferentes a los que tiene normalmente en la naturaleza, provenientes de otro organismo e introducidos artificialmente, para que produzca una o varias proteínas que naturalmente no producía. Proteínas que generaran las características deseadas.
Por ejemplo, supongamos se desea
que una rosa blanca en la naturaleza sea azul, entonces se toma el gen de una
flor azul de otra especie que produce la proteína que genera el color azul, y
se introduce en el ADN de la rosa blanca, entonces se produciría una rosa azul.
Exactamente lo mismo se haría en
otro organismo para otras características, como ya se comente, apariencia,
sabor, olor, nutrientes, y otras características menos apreciativas, pero
importantes para la productividad, como alta producción y resistencia
a plagas, sequias, calor, frio, humedad, salinidad, etc.
Y dado que no hay límite en teoría
de que genes intercambiar y cuál es su origen, pueden ser organismos de
diferente clase al que se extrae y se introduce el gen.
Podría pensarse es algo reciente que los humanos manipulen organismos para su beneficio, y que no se pueden manipular usando métodos "naturales". Sin embargo desde el momento que descubrieron los humanos la agricultura y la domesticación de animales han modificado organismos, desde decidir que planta o animal con cierta característica se reproduce y cual no, y seleccionando que organismo de la misma clase se reproducirá con quien. Donde más puede notarse esta manipulación es en los granos (maíz, trigo, arroz) que consumen los humanos, que casi no se parecen a los silvestres; y las muy diferentes razas de perros, que todas provienen del lobo.
Lo único diferente en la
actualidad, es el método, que es más selectivo y eficiente, y no es un límite
sean de distinta clase los organismos.
Cuestiones a resolver
Hasta aquí la idea es excelente, podrían crearse productos alimentarios capaces de prosperar en cualquier condición por terrible que sea, libre de plagas, con todos los nutrientes, características que podrían acabar con el hambre, la pobreza y las enfermedades. Pero no hay nada perfecto, hay problemas y cuestiones que surgen y deben resolverse.
La primera y principal cuestión es la de cual proteína, o bien sustancia resultante de su actividad, se desea se produzca. No es lo mismo una proteína que se consume normalmente por su propiedad alimenticia como la de la carne, soya, etc; que una proteína que no se consume normalmente con propiedades plaguicidas o anticongelantes.
Lo lógico sería que antes
de crear un organismo transgénicos que produzca una proteína no antes consumida,
se hagan pruebas rigurosas de los efectos de la proteína en el ser humano
durante un tiempo adecuado, sin embargo esto no siempre se hace de esa manera,
solo por intereses económicos, siendo ese un problema importante. Esto se
ejemplifica con el maíz Starlink que produce la toxina plaguicida Cry9C.
No obstante esta cuestión
significa que ningún producto transgénico es igual a otro, y erróneamente se
generaliza a estos, podría haber un transgénico que solo produce una cierta
vitamina y no tendría ningún riesgo, a diferencia del que produce un
plaguicida. Así que más que etiquetarse solo como transgénico, debe etiquetarse
que proteína o sustancia produce ese transgénico, y saber si tiene riesgo o no.
La segunda cuestión, es la técnica actual para introducir un gen a una célula animal o vegetal, y luego activarlo.
Generalmente cuando no se
requiere que el nuevo gen se conserve en las células descendientes de la celula
manipulada, con solo introducir el gen en la zona exterior del núcleo de la célula
es suficiente. Sin embargo en los organismos transgénicos el objetivo es que se
conserve el gen en la descendencia, y para esto debe ser insertado al genoma de
la célula. El problema es que el lugar del genoma donde se inserta el gen
ocurre totalmente al azar, con la posibilidad de que altere o mute el código de
otro gen en el genoma o secuencias de control, y se produzca una segunda proteína
normal alterada o se produzca en grandes cantidades anormales, que en ciertos
casos podría ser nocivo.
Otro aspecto importante, es que
el hecho de introducir un gen, no significa que instantáneamente producirá la proteína.
Muchas veces hace falta alterar secuencias de control de los genes, para que el
gen introducido se active y produzca la proteína deseada, y el riesgo proviene
de que se mantendría siempre encendido ese gen no dejando nunca de producir la proteína,
que podría alcanzar nivel tóxicos. De igual manera de forma secundaria podría
activar y mantener encendidos otros genes normalmente apagados.
La tercera cuestión es el control de las compañías biotecnológicas sobre los organismos transgénicos.
Por una parte las leyes de
patente de EUA y Europa permiten que los genes usados para crear un organismo transgénico
sean patentadas, y nadie puede usarlos sin pagar el precio que imponga la
empresa que lo hizo. Así un gen o genes que hicieran más nutritivo a un
organismo, no podría cultivarse por cualquiera libremente. Así las ventajas
solo son para unos pocos. Un ejemplo es el arroz transgénico, conocido como
Arroz Dorado, que produce vitamina A, pensado para cuestiones humanitarias, y
tiene limitaciones legales por genes que están patentados por diversas compañías.
Así no puede lograrse el ideal de acabar con el hambre.
Por otra parte esta la manipulación
por cuestiones económicas de los organismos transgénicos, especialmente en
plantas para que una vez desarrolladas, no produzcan semillas fértiles,
obligando a los agricultores a comprar cada ciclo semillas a la compañía.
Por ultimo esta la cuestión ecológica, por un lado la diseminación del gen insertado en el organismo transgénico en las especies no transgénicas, por el cruzamiento natural, provocando todas las especies de un organismo en especial, como el maíz, produzcan la proteína de la especie transgénica. Que si fuera una proteína que se demuestra es toxica o nociva, tendría implicaciones importante, como que todas las especies del planeta por ejemplo de maíz no puedan consumirse o cause la muerte de especies que en la naturaleza lo consumen.
Por otro lado, una alteración transgénica
para hacer más productiva o resistente a una planta, podría terminar por
volver plaga a esta u otra especie similar y competir con las
especies nativas, eliminando a estas últimas, o cambiar el suelo o el
ecosistema de forma perjudicial.
El conocimiento científico detrás
de la tecnología del ADN recombinante y los organismos transgénicos no es ni
buena ni mala, todo depende de la manera que se use, y es innegable su enorme
potencial para resolver muchos de los problemas que han aquejado a la
humanidad. Sin embargo este conocimiento es muy poderoso, requiere una gran
responsabilidad y sabiduría como va ser usado, y no debe rendirse a meros
intereses económicos de unas pocas corporaciones.
Ricardo Rojas C.
Fuentes:
Grandes científicos:
Watson & Crick
¿Qué es la tecnología
del ADN recombinante?
Síntesis Proteica
Transgénicos
El maíz StarLink
Transfección
Potrykus y el arroz
dorado
Transgénicos, asalto
a la soberania alimentaria
Riesgos y
Preocupaciones
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